miércoles, 7 de marzo de 2012

Contigo no sé como hacerlo. Si te miro, porque te miro, y si no, porque no lo hago. Mido mis palabras, no sabes cuanto, ni siquiera sé en que forma mirarte, incluso me da miedo que me brillen los ojos, ¿qué se te pasaría por la cabeza? No puedo evitarlo, parece que estoy siempre a la defensiva, pero ya sabes que los amores reñidos son los más queridos. Si me cruzo de brazos es por controlar el impulso de lanzarme a ti, aunque otras tantas también sea por evitar matarte de algún modo. Me descontrolas, y no sé hasta que punto puede ser bueno eso. Nervios a flor de piel, demasiados impulsos, aún queda mucho por resolver. Si aprieto los labios, siento no ser tan directa, es por reprimir en cierto modo todo lo que hablaría. Explotar no es lo bueno, pero sacas lo peor y lo mejor de mi, en cierta manera, y en dosis diferentes... una bastante más pequeña que la otra.





2 comentarios:

  1. Me gusto... tiene algo que me llena y me hace pensar.. algo que aunque hipoteticamente es negativo se convierte en positivo dentro de las personas.. :P

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  2. jaja pues espero seguir escribiendo cosas que te hagan sentir bien :)

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